ketogenic diet

DIETA KETO o «keto diet» ¿Es para ti?…

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La dieta cetogénica o “Keto diet” es un tema de actualidad en el mundo de la nutrición.

¿Qué se busca obtener con la implementación de la dieta cetogénica?

Bajar de peso.

A veces, las personas empiezan a experimentar deseos intensos sobre bajar de peso para mejorar la apariencia y para mejorar la salud y sentirse bien con ellos mismos ya que en muchas ocasiones el sobrepeso y la obesidad generan en la persona sentimientos y sensaciones que afectan el autoestima y los hace productores infinitos de pensamientos negativos en su propia contra. Esto es totalmente entendible, dado que el fin global de todo ser humano es ser feliz y si bajar de peso significa aumentar los niveles de felicidad, pues para allá hay que ir!.

Hasta este punto está todo bien. Pero tenemos que tener cuidado con las dietas que hay actualmente, ya que no todas logran el beneficio ofrecido. En un 85% las dietas pueden fallar y las personas se desmoralizan hasta tal punto de generarse autocastigos en algunos casos, tales como comer excesivamente alimentos con alto contenido de azúcar lo que se traduce en perder la fe en ellos mismos porque no lograron su objetivo. Es un círculo vicioso que dependiendo de muchos factores puede arraigarse y generar más desconfianza en el propio individuo y perpetuando los posibles problemas de salud que surgen por la inflamación crónica de bajo grado que se observa en estados de sobrepeso y obesidad.

La dieta cetogénica se caracteriza porque mimetiza un estado de ayuno. Se podría decir que el cuerpo actúa como si estuviera en ayunas porque no hay glucosa disponible a partir de los carbohidratos debido a que en esta dieta los carbohidratos solo representan el 10% del requerimiento diario de calorías, razón por la cual se ve obligado a extraer la energía mayormente a partir de las grasas que representarían hasta el 80% de dicho requerimiento. Cuando ocurre esto, se extraen componentes llamados “cuerpos cetónicos” y son los responsables de otorgar energía a todos los órganos (cerebro, pulmones, riñones, corazón, etc) y no la glucosa.

A nivel interno durante este proceso se desarrolla la deshidratación en primera instancia ya que este estado genera mayor pérdida de agua vía renal, así como de electrolitos tales como calcio, magnesio, vitamina A, potasio, vitaminas del complejo B, entre otras. El individuo puede experimentar sed y el ejercicio que realiza puede ser un poco más extenuante.

Desde el punto de vista terapéutico se utilizan las dietas cetogénicas para tratar convulsiones, parálisis cerebral (algunos casos), Alzheimer y otras ya que se determinó que su uso en estos casos disminuyen los signos de dichas enfermedades.

Otros efectos de la dieta cetogénica que se pueden presentar con frecuencia al inicio (los primeros 4 a 5 días) son fatiga, dificultad para concentrarse y para respirar, nauseas, indigestión y dificultad para dormir.

Se debe tomar en consideración la función renal y hepática ya que se ha observado que ocurre un desbalance en el metabolismo dado que a mayor cantidad de cuerpos cetónicos en sangre, más problemática se verá su funcionalidad.

Además, existe el gran punto crítico que se reconoce cuando aumentan las ganas de comer otro alimento, y estas ganas van apareciendo con más frecuencia hasta que rompemos la dieta.

Es posible que a pesar de todo esto, queden con la duda clave… “Pero… ¿La dieta cetogénica o keto diet puede hacer que disminuya mi peso?”

Si.

Se han realizado numerosos estudios clínicos en pacientes obesos y dieta cetogénica y se han observado beneficios en cuanto a la pérdida de peso, sin embargo a largo plazo no es recomendable porque no genera el mismo efecto que en las primeras semanas. Llega un punto donde es inviable continuar debido a que no se consigue avanzar con la pérdida de peso y diversos efectos adversos pueden presentarse.

Pero… ¿Qué necesidad hay de pasar por malestar y “sacrificios” por hacer una dieta? ¿No es mejor aprender a comer para sentirte bien y mejorar cada día?

En mi opinión, al buscar la felicidad y el bienestar se deben considerar factores y quizás hacer sacrificios pero se debe valorar mucho cada célula de nuestro organismo porque son ellas y nuestros órganos los que nos permiten estar día a día en pie y debemos motivarnos a mantener la salud pero con una visión más saludable valga la redundancia a través de un plan de alimentación y no de dietas.

Hay formas de conseguir un buen peso, un peso que nos haga feliz sin necesidad de sentir sed, o someter a nuestro organismo a momentos de alarma, sin que sufra nuestro hígado y nuestros riñones, nuestros pulmones y nuestro corazón. Nuestro cerebro. Todos los órganos “nos hablan”, nos hacen saber si algo va mal y es preciso aprender a entender estas señales para garantizarnos calidad de vida. 

Al aprender estas señales, nos motivamos a buscar el mejor camino para cada uno de nosotros. Nuestra felicidad es el objetivo y el camino puede ser difícil o puede ser más amigable y ameno y solo tú puedes elegir.

Artículo realizado por Valentina Velasco.

Fuentes:

Food and Nutrition Science 2020.

Lcda. Elsy Oráa Hernández en su artículo “Ayuno Intermintente y Dietas Cetogénicas: cuando los caminos cortos no siempre resultan mejor” Caracas, Venezuela.

International Journal of Environmental Research and Public Health.